Hace un par de semanas recibimos un comentario en Instagram, lo que venía a decir era que cómo podíamos utilizar Rodio en nuestras piezas si era un material tóxico, imaginaros nuestra cara de asombro al pensar que alguien puede pensar que vendemos algo que es dañino para las personas. 

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Tenemos que decir que no todo lo que leemos es verdad. 

Al final, alguien que no está inmerso en este mundo puede no tener experiencias propias para poder sacar su propia conclusión y en este blog queremos explicar un poco cómo es el baño de rodio. Es un acabado que en Sibela utilizamos en muchas de nuestras joyas acabadas en blanco.


El rodio es un metal precioso más caro que el oro y la plata y se utiliza para dar baños a las piezas de plata y oro con un acabado blanco. Un baño de Rodio es una técnica cada vez más conocida y utilizada en joyería con el que conseguimos blanquear las piezas y que brillen de una manera muy especial. Este material es perfecto para las personas que sufren alergias ya que es uno de los materiales que menos alergias da. 

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Pero nos metemos en terreno pantanoso y nos centramos en lo que todas estamos pensando al leer la introducción: ¿El rodio es un material tóxico?
Sí, el rodio es un material tóxico, pero solo si se utiliza como material base para crear una joya. Por ello solo se utiliza para darle el acabado final y así como el oro o la plata se oxidan, el rodio es mucho más resistente y hace que la pieza se mantenga como nueva mucho más tiempo.  
Conseguimos el acabado final en rodio sumergiendo la pieza en una solución química con pequeños granos de rodio y mediante un proceso electrolítico, las micropartículas de rodio se adhieren a la joya sumergida formando una capa. 
Todos estos procesos están certificados por un laboratorio que certifica su calidad.



Isabel Peña